La presencia online de los abogados y bufetes ocupa cada día un papel más relevante dentro de los modelos de negocio jurídicos. En este contexto, la web se ha convertido en la principal carta de presentación para muchos despachos de abogados y un medio donde es vital conocer qué objetivos perseguir.

La reputación se ha convertido en uno de los activos más preciados de cualquier organización y una de sus principales fuentes de valor intangible. En los servicios profesionales y en el sector legal en concreto, la reputación corporativa adquiere una dimensión aún mayor, pues varios de sus principales atributos, como la calidad, el prestigio, la fiabilidad, la credibilidad o la confianza alcanzan una capacidad diferenciadora para atraer y fidelizar clientes y profesionales.

Según varios estudios del sector legal, la reputación de la firma y la del letrado son dos de los principales atributos para la toma de decisión de contratación de los servicios jurídicos.

Es importante tener claro que no es lo mismo la reputación digital u Online que la imagen de marca:

• La imagen de marca puede generarse y potenciarse mediante mensajes publicitarios, puesto que que es la propia organización la que tiene el control sobre dichos mensajes.
• La reputación Online es un factor enormemente influenciado por los comentarios y mensajes de terceras personas, sobre todo por aquellos que la empresa no puede controlar.